- ¿Nos ha pasado alguna vez, al ir a mirar piensos para nuestro perro o gato, que no entendemos en que pueden ser diferentes unos y otros salvo en el precio?
- ¿De verdad le estamos dando lo que más le conviene a nuestra mascota?
- ¿De verdad hace falta irse a las marcas más caras para asegurarse de que tu mascota está bien alimentada?
Vamos a intentar arrojar algo de luz sobre éstas cuestiones desde Mascotas Milú:
¿Para qué es cada componente del pienso?
Un buen comienzo para distinguirlos es fijarse en su porcentaje de proteínas, grasas y materia inorgánica (también llamada "ceniza").
- Ceniza: Nada que ver con la de tu chimenea. Es el componente mineral del pienso (calcio, fósforo, zinc, hierro...) que también es necesario, en pequeñas cantidades, para tu mascota. Sin embargo, niveles más altos de ceniza no son buenos puesto que el animal no las digiere y son perjudiciales en casos de mascotas con problemas renales.
- Proteínas: Aquí no solo cuenta la cantidad sino la calidad, pero lo primero ya permite orientarse. Cuanto más activo es un animal, o si es lactante, anciano, cachorro o está enfermo, más proteína necesita. La proteína de pollo es especialmente buena. Un exceso de proteinas se elimina por la orina, sin más complicaciones.
- Grasas: Cuanto más graso sea el pienso, más apetecible le parecerá a tu mascota... pero igual que pasa con nosotros, también le engordará más. Los cachorros o los animales de mucha actividad no tienen problemas para desgastar esa grasa; pero las mascotas más pasivas, las que sean mayores, estén esterilizadas o tiendan a engordar necesitarán piensos con poca grasa.
Aparte de éstos tres porcentajes, los piensos tienen otros como el de
fibra (importante para el tránsito intestinal) o el de
humedad.
¿Y que hay de las marcas más caras de pienso de mascotas?
En éste punto hay que asumir dos verdades que todos ya sabemos de antemano:
1) Nadie da duros por pesetas. Lo bueno hay que pagarlo
Casi todas las marcas tienen tres gamas, la económica, la media y la de mayor calidad.
Y es obvio que en las superiores cada ingrediente y su porcentaje están mucho más medidos y son mejores. Aparte, estas gamas también llevan añadidos en forma de vitaminas, o jalea real, que pueden hacer que por ejemplo el pelo y los dientes del animal estén en mejor estado.
¿Eso significa que el perro va a estar mal alimentado si se le da un pienso de gama económica? No tiene por qué, mientras no nos vayamos a los extremos y sepamos que el fabricante del pienso es de confianza. Un perro podría comer pienso económico toda su vida y mantener una salud de hierro, y otro comer pienso de gama muy alta y tener una salud delicada. Quizá el primero nunca gane un concurso de belleza, pero la mayoría no queremos a nuestro perro para eso ¿verdad?
2) Como con todo en la vida, la "marca" también se paga
Está claro que
usando las gamas altas de marcas como Royal Canin o Affinity (gama Advance)
estamos garantizando que nuestro animal está comiendo prácticamente lo mejor que podría comer; pero precisamente por la garantía que nos da "la marca" tenemos que asumir que
vamos a pagar un sobreprecio.
Si buscamos la mejor relación calidad-precio, quizá descubramos que las gamas medias o altas de
otras marcas menos conocidas como Visán o Picart (entre otras muchas)
pueden darnos lo mismo (o casi) por un precio menor.
A partir de ahí, claro, cada uno conoce sus circunstancias y su presupuesto ^^
